La obligación del escritor es hacer su obra lo mejor que pueda hacerla, cualquier obligación que le quede después de eso, puede gastarla como le venga en gana. Yo por mi parte, estoy demasiado atareado para ocuparme del público. No tengo tiempo para pensar quien me lee. No me interesa la opinión de Juan lector sobre mi obra ni sobre la de cualquier otro escritor. La norma que tengo es cumplir mi norma.
William Faulkner
(Citado en Alquimia de escritor)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario